Gotemburgo Julio 2014
PAIAP es un nuevo palíndroma, una visión curatorial y una práctica poética.
Y nace por la necesidad de crear un contexto a mi práctica artística, un lugar que así permita introducir mis preguntas en un ambiente no propio.
Mis primeros contactos, cuando inicio este proceso, son con artistas de arte de acción o performativo, en algunos países de América Latina. Sin duda el aspecto idiomático influyó en esto de modo decisivo, y aparecen así Inti Pujol, Silvio de Gracia, Rodrigo Rada, Santiago Cao, Tzitzi Barrantes, Juan Montelpare, Eli Neira, Clemente Padín, Sandra Rami, Alexia Miranda, Macarena Perich, Soledad Sánchez Goldar, Gonzalo Rabanal, Prem Sarjo, Rose Boaretto, Valeria Andrade, Carlos Monroy, Elvira Santamaría.
A cada uno les planteaba mis preguntas y mis ideas acerca de problematizar el espacio “público”, el “arte” y la disciplina “performativa”, y particularmente en el principio, el referente creacional de arte de acción de América Latina. Al estar viviendo en Europa, particularmente en Escandinavia, sentí una imperiosa necesidad de actualizar las imágenes, los relatos, las prácticas producidas desde éste continente, principalmente desde países que simplemente no aparecen en el mapa de arte contemporáneo performativo, como es el caso de Bolivia, El Salvador, Cuba o bien el de Chile o Argentina. Los festivales tanto europeos como asiáticos que se han organizado en los últimos 10 anos incluyen como “representaciones” de América Latina a Brasil y México, imposible invisibilizarles. Y la estética de la vieja escuela vienesa ha también dibujado unos márgenes exactos entre los cuales hemos estado desplazando nuestros gestos. Re instalando una práctica estética y contiene, as´como toda nuestra parafernalia “cultural” una reproducción colonial, como si nunca dejásemos de ser invadidos.
En mi análisis incorporo también una crítica consciente y fundamentada al sistema de distribución/difusión del arte performativo experimental que, casi exactamente como hace 80 años denunciaban dadaístas, carece por completo de criterios de inclusión y con ellos se daña el proceso y resultado de la obra/instalación/acción haciéndola centrada en sí misma y por ello sin ninguna capacidad de influir/modificar la actuales estructuras ético estéticas en las que se fundan los parámetros sociales con lo que cualquier sistema se proclama verdadero y necesario.
Por supuesto poner esta discusión en un medio cultural como Suecia no es ni fácil ni cómodo. La “performance” o arte de acción es de corta data en estas latitudes, los contados encuentros o festivales no tienen más de 10 años y con muy contadas excepciones, ente los artistas invitados, puedes hallar algún nuevo cultor de América Latina.
He querido poner especial énfasis en la idea de convocar a creadoras/es latinoamericanas/os que no sean el resultado de una visión hegemónica occidental, sino el punto exclusivo y auténtico de artistas que nos dan la posibilidad de vivenciar sus apuestas/búsquedas estéticas sin filtros europeos.
Crear una plataforma de cultoras/es con una perspectiva crítica respecto del performance en sí; priorizar los trabajos individuales en su realización escénica; y que todos estos estén orientados a iniciar un diálogo creativo con los prefijos de lo Auténtico y el Espacio Público.
La plataforma PAIAP aportará al desarrollo del arte de acción con publicaciones alternativas, en red y elaboración de material didáctico: fotografía, vídeos, seminarios, teoría estética, talleres de investigación, que permitan nutrir a nuevas generaciones y asimismo faciliten el contacto transversal entre generaciones de artistas, y un cruce transversal de los diversos tipos de público.
Una plataforma es un espacio horizontal en el cual todxs tienen un lugar donde llegar y desde donde zarpar, para un sano empoderamiento consciente de la tan mentada globalización.
PAIAP debe ser capaz de dar cuenta de las últimas creaciones de artistas en cruces disciplinares en América Latina, como punto inicial, y así difundir la diversidad estética del continente, su particularidad y permitir ampliar el público aquí en Suecia. Pero también de la diversas experiencias en arte de acción en otros lugares del mundo, teniendo como puerto a Gotemburgo.
PAIAP considera fundamental la des-elitización del arte experimental y esto pasa principalmente por incluir nuevos públicos y fomentar la experimentación desde diversas disciplinas.
Una PLATAFORMA de cultoras/es y espectadoras/es que dinamicen la búsqueda y el cuestionamiento de nuestros mentados patrones culturales de occidente.
El arte de acción ha contribuido a romper los cánones de distribución y apreciación, fronteras entre los formatos y al mismo tiempo ha situado la experimentación artística en un proceso vital, dinámico, consciente y concreto, permitiendo que los cruces de significado y aproximación sean en sí más válidos. Dejando la subjetividad en el terreno de lo verdadero y único que realmente disponemos.
Arte de acción o intervención, arte vivo, está en un momento de resurgimiento. Pero la capacidad de la “cultura” de absorber y mediatizar es también más rápida y poderosa que antes.
El establishment mediático ejecuta su política de sometimiento estético y filosófico, de cómo crear sentido y significado, a la existencia, quitándole la carga alterativa a cualquier disciplina que se diga “de vanguardia”.
Es cada vez más normal ver a las grandes instituciones, llámense gobiernos, corporaciones, fundaciones, promoviendo los encuentros de “performances” a nivel mundial. Un modo simple de decir que nada de lo que hagan es realmente importante para el status quo de la forma de significar el mundo y su modus vivendis.
Bueno, aquí está el acento de diferenciación de lo Auténtico, situar la discusión y el accionar creativo para fomentar la ruptura con tanto mal gusto, con un modo único de socialización, con un modelo de humanidad que sangra devastándose a sí misma en matanzas brutales y/o criminales bancarios.
Auténtico es lo propio, y ahí está la multiplicidad - unidad de cada ser en esta existencia. Las posibilidades son infinitas, no permitamos que un puñado de mediocres encorbatados nos convenzan de lo contrario.
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El espacio público también es el resultado de un modo de construcción social, por ello las obras performativas en él serán intervenidas por la propia tautología material del lugar y sus ritualidades.
En este sentido la plataforma PAIAP intenta crear los medios para que cada artista realice su diálogo y difunda su discurso gestáltico sin mayor mediación de ningún plano. Un modo de intervenir la monotonía inválida del capital-material en cualquiera de sus manifestaciones. El espacio público es el lugar que nos queda para identificar y eliminar el sometimiento. El goce colectivo de la creatividad como algo profundamente revolucionario. Probar todos los modos de utilización del espacio como plataforma natural de la especie humana para su existencia, la autenticidad está ahí, pero también ahí la reproducción cotidiana de un sistema sin sentido. Autentificar es denunciar y realizar profundos cambios paradigmáticos que acaben con la monetarización de la existencia.
Autenticidad lo asocio a recuperar nuestra propia particularidad, no hegemónica, no monetaria, no estática, orgánica como nuestras mínimas células, todas tan distintas y tan unidas en su distinción.
Autenticidad es un vínculo con una memoria otra, no la de pueblos invasores o invadidos.
Autenticitet es la ruta más corta para una libertad en solidaridad, como todos los organismos sobre la tierra,
authentĭcus no es estático, por el contrario es dinámico y lúdico, incorpora, incluye,
es la capacidad humana de sinergia y busco con este nombramiento
recuperar para todxs la expresividad contemporánea y todas sus posibilidades.
Estocolmo, Septiembre 2009
©HGJ/PAIAP
On Line, acontecer. ©foto Arngrim Larsen. Götaplatsen, Mayo 2012